
Leo un artículo de un hombre que donó su cerebro a la ciencia para ser estudiado porque no podía recordar.Había perdido la capacidad de tener nuevos recuerdos , sólo mantenía los antiguos hasta una operación radical que sufrió para curarle una epilepsia terrible que padecía.
Cada día era nuevo para él , todo era novedad y nada le cansaba. Fascinante.
¿Se enamoró después? No puedo imaginar que alguien se enamorara de mí cada día como si fuera el primero , siempre sería el primero , debe ser una sensación insuperable . Nunca se ha podido describir algo tan romántico como ese hipotético caso : el primer flechazo repetido, ad infinitum.
No hay comentarios:
Publicar un comentario