Estamos en plena cumbre en Copenhague y nuestro presidente vuelve a las andadas.Sólo hay una cosa peor que un tonto y es un tonto solemne (o trascendente) . En una cumbre de asunción de responsabilidades , o eso dicen , a nuestro más famoso artista se le ocurre eso de «La Tierra no pertenece a nadie, salvo al viento» .
Después de un discurso retórico (según la tercera acepción del diccionario de la R.A.E.) lleno de bonitos deseos navideños y perogrulladas ,como es habitual en él ,se destapa con la mencionada frase. Oh , insigne vate.
Más le valdría al salvador del planeta poner orden primero en casa; por si no lo sabe , se le están secando todos los humedales y tiene la desertización en puertas , tiene medio país permanentemente arrasado por incendios que nadie se huele hasta que es demasiado tarde , las praderas de posidonia arrasadas por los pesqueros de arrastre y tantas otras cosas anti-planetarias (de poco vale que no suba la temperatura si no hay nada que proteger , merluzo).
No entiendo nada.
El Roto lo ha entendido a la perfección.
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